En este Día de la Alimentación, la Lic. Laura González (MN 8413), quien coordina nuestro Servicio de Nutrición Corporativa, ha respondido a algunas preguntas relacionadas con la importancia de promover hábitos saludables de alimentación dentro de las empresas.
También ha compartido diversos consejos para que las compañías puedan promover la alimentación saludable dentro de las jornadas laborales de sus empleados.
¡No te pierdas este artículo!
¿Por qué es importante cuidar los hábitos saludables de alimentación en el trabajo?
Promover estilos de vida saludables y una buena alimentación en las empresas trae beneficios a nivel tanto individual como colectivo. Esto se debe, en primer lugar, a que los empleados trasladarán esos hábitos a sus familias y allegados.
Pero, por otro lado, debemos tener en cuenta que el activo más valioso de una empresa son sus empleados, ya que el factor humano está directamente vinculado tanto con la productividad como con la rentabilidad de una compañía. Por lo tanto, querer fomentar y cuidar de su salud es fundamental.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional de Trabajo (OIT) afirman que una nutrición adecuada puede elevar la productividad de los empleados hasta un 20%, ya que una persona bien alimentada tiene más oportunidades de:
- Trabajar mejor
- Lograr un mayor rendimiento laboral, gracias a un adecuado aporte de energía y nutrientes
- Tener mayor bienestar físico y mental
- Mejorar la productividad
¿Por qué creés que tanta gente tiende a no tener hábitos saludables de alimentación en el trabajo?
Es común que los colaboradores dejen de lado la importancia de una buena alimentación durante las horas de trabajo.
Pero, si ponemos atención, nos daremos cuenta de que comúnmente se destina un tercio del día, si no más, a trabajar. Eso se traduce en que una, dos y a veces hasta tres de nuestras ingestas se dan en el marco del horario laboral, por lo que no es algo menor.
En este contexto, la planificación de las comidas se vuelve especialmente importante. Sin embargo, la tendencia actual muestra grandes niveles de improvisación por parte de los empleados, y ese es el principal error, ya que se termina yendo por “lo fácil”. Y, hoy en día, lo “fácil” son productos ultraprocesados y poco sanos.
¿Qué alimentos son buenos para tener a mano durante el trabajo? ¿Y cuáles es mejor evitar?
Dependiendo de la franja horaria que abarca la jornada laboral, pueden aconsejarse diferentes alimentos saludables y de fácil accesibilidad:
- Para desayunos y meriendas: optar por frutos secos, frutas frescas y/o licuados, cereales integrales (pan y barritas de cereal reducidas en grasas) y lácteos descremados
- Para almuerzo y cenas (jornadas nocturnas): carnes magras, vegetales, legumbres y huevo, cereales integrales.
En caso de que no se pueda planificar las comidas por algún motivo excepcional, se aconseja evitar los alimentos ultraprocesados y prestar especial atención al etiquetado frontal, para así poder elegir los más adecuados.
Consejos para las empresas para mantener hábitos saludables de alimentación en el trabajo
La alimentación debe ser planificada e incluida dentro de los horarios de la jornada laboral, de manera organizada y siempre que se pueda.
Para ello se ofrecen diferentes estrategias a los empleadores, de forma tal que puedan poner al alcance de su personal herramientas para mejorar los hábitos alimenticios:
- Talleres de alimentación en el trabajo
- Dictado de capacitación de etiquetado frontal
- Consultoría nutricional
También existen pequeños tips que las propias empresas pueden seguir:
- Frutas accesibles para el personal
- Motivar a realizar cortes para las comidas estableciendo horarios
- Contar con reservas constantes de agua segura
- Y exigir opciones saludables a las concesiones gastronómicas en aquellos casos donde hay comedor
¡Visitá nuestro Blog para leer más notas vinculadas a los hábitos saludables!